Matutina para el Día 62 | Marzo 3
“Y lo que viste de los pies y los dedos, en parte de barro cocido de alfarero y en parte de hierro, será un reino dividido; mas habrá en él algo de la fuerza del hierro, así como viste hierro mezclado con barro cocido.” Daniel 2: 41
La referencia que Daniel hace sobre los dedos de los pies, apunta claramente a un reino dividido, con diferencias entre sí. El hecho que tenga algo del hierro, habla de su coneccion con el imperio anterior, pero el elemento del barro nos muestra debilidad, el elemento humano y una connotación religiosa que ya vimos en el comentario de Daniel 2: 33
Los Pies son utilizados de múltiples maneras en la Biblia. Desde el punto de vista cultural, en las tierras del Oriente la reverencia se demostraba desplazándose. Los hebreos también se quitaban el calzado en momentos de gran desgracia y de duelo. El respeto por otra persona se mostraba postrándose a sus pies . Los victoriosos los ponían sobre los cuellos de los conquistados como un signo de dominio. El salmista declara que por cuanto sirvió fielmente a Dios sus pies estuvieron en 'suelo llano'. Cuando a alguien lo alcanzaban los resultados de su maldad, o caía en pecado, figuradamente se decía que sus pies habían tropezado o resbalado. La expresión 'sentarse a los pies de un maestro' era literalmente cierta y demostraba el respeto del alumno por su maestro y la autoridad de este último. El profeta llamó a su pueblo a apartar sus pies del sábado, con lo que quería decir que debían dejar de profanar el día de reposo semanal. En la última cena, Jesús lavó los pies de los discípulos, ocupando el lugar del siervo, que comúnmente lo hacía para limpiar el polvo de los pies de los invitados que llegaban. Hoy ten cuidado de donde pisan tus pies y si han resbalado, pídele a Jesus que los limpie.
Soy Oscar Oviedo y este es el Devocional “Daniel en 365 días”
Producido por el Ministerio One4Seven
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