Matutina para el Día 180 | Junio 29
“Entonces se juntaron aquellos hombres, y hallaron a Daniel orando y rogando en presencia de su Dios.” Daniel 6: 11
Esta era la segunda fase del plan de los enemigos de Daniel. Ellos no tuvieron que esperar mucho para que Daniel hiciera caso omiso de la prohibición del rey. Con decreto o sin decreto, este hombre de Dios tomó la decisión que debía continuar con sus hábitos regulares de oración. Dios era para él la fuente de toda su sabiduría y éxito en la vida. El favor del cielo era más importante que la vida misma. Su conducta fue el resultado natural de su confianza en Dios.
Es muy interesante la forma en que los príncipes y sátrapas se reunieron para visitar a Daniel, tal vez con el pretexto de hablar de negocios, en ese momento sabían que era su hora habitual de devoción; y, si no lo hubieran encontrado llevando a cabo su rutina espiritual, tal vez lo habrían reprendido por su desconfianza en su Dios, pero lo encontraron de rodillas orando y suplicando ante su Dios. Esta visita tumultuosa es mencionada en el libro de Salmos 2: 1 “¿Por qué se amotinan las gentes, Y los pueblos piensan cosas vanas?” Los enemigos del pueblo de Dios no son pocos y en los eventos del tiempo del fin estarán presente de en un frente unido. ¿Que podremos hacer? Daniel no da la respuesta: ¡Orar! ¿Qué podría suplicar Daniel en esos momentos? Por amor a nuestros adversarios; de la misma manera que el rey David oraba: “En pago de mi amor me han sido adversarios; Mas yo oraba.” Sal. 109: 4. Y de ¿qué serviría eso? Demostraría el reflejo perfecto de nuestro Salvador Jesucristo quien hasta el final de su vida oraba por su enemigos
Soy Oscar Oviedo y este es el Devocional “Daniel en 365 días”
Producido por el Ministerio One4Seven
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