Miércoles 4 de Marzo, 2020
Vivimos en una sociedad en la cual la gente no se responsabiliza de sus actos. Generalmente la gente reacciona instintivamente buscando transferir la culpa de sus errores a alguien más. Esta generación parece nunca cometer errores, siempre es la culpa de alguien más, nunca la mía. Culpa de alguien ó de algo, menos mía. Culpa del gobierno, ó del cajero, ó del conductor de al lado. Hoy nadie es culpable de nada, nadie es responsable de lo que hizo, ó dejó de hacer.
Pero sabes, no es problema de hoy, es problema de siempre. Eva culpó a la serpiente. Adán culpó a Eva. Caín dijo "No sé. ¿Soy yo acaso guarda de mi hermano?"
Y aquí estamos, en Babilonia, ahora gobernada por reyes persas. Casi setenta años desde que Daniel, aquel mozo fue entregado al capitán de los eunucos. Casi setenta años de soledad y de estudio, y de oración, y de visión tras visión tras visión...
Lejos de negar su culpa y reprochar a YHWH por su situación, Daniel invierte diez versículos en resumir algunas de las razones por Ias que su pueblo fue sometido al juicio de YHWH:
Dan 9:5 — Dan 9:14
Solamente dos cosas quiero agregar. La primera es con respecto a los versículos 7 y 8 en donde dice "confusión de rostro". En el hebreo dice "la vergüenza de nuestros rostros". El tipo de vergüenza que sentimos cuando sabemos que somos culpables, y que normalmente se refleja irremediablemente en nuestra expresión facial. La segunda es con respecto a tí personalmente. ¿De qué manera te afecta esta oración? La oración de un anciano de aproximadamente 90 años de edad diciendo una y otra vez "todo Israel traspasó tu Toráh". ¿Seguirás ajeno al Toráh de YHWH? ¿Puedes seguir repeliendo sus instrucciones eternas sabiendo que violarlas es lo que llevó al Reino del Norte y al Reino del Sur al exilio? YHWH Io prohiba y nos de entendimiento a comprender las palabras de Yeshúa:
"No vine a abrogar el Toráh, sino a cumplirlo".