Pablo continúa persuadiendo a los gálatas de la realidad de que todo lo que ellos han obtenido ha sido por la fe y no por las obras: el Espíritu Santo, el ser parte del pueblo de Dios y la bendición de Abraham.
En este sermón veremos que también el pacto y la promesa vinieron por medio de la fe y no por las obras, que Cristo le fue dado a Abraham antes de la circuncisión y la ley y así mismo ha sucedido con ellos.
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