Hoy he usado una técnica que aprendí a principios de año: correr hacia atrás.
La sesión ha sido tranquila. 4.5 km de carrera muy suave y alternando pequeñas series de unos metros corriendo hacia atrás.
¿Por qué?
Para mantener el equilibrio y mejorar la posición.
Y mola mucho.
Y mientras corría escuchaba el podcast de RNE “Sapiens” (cómo el título del libro que leí este verano). Aquí tenéis el enlace.