Lucila Zambianchi analiza esta novela de Delphine de Vigan que nos invita a pensar cómo leemos, que buscamos en la literatura y que esperamos de las autoras que nos gustan.
Es un libro con mucho suspenso que encara una discusión ya infinita entre ficción y realidad.
¿Nos generan una atención diferente las historias “basadas en hechos reales”?