Hay consecuencias difíciles de predecir. Hay consecuencias que sólo vas a conocer una vez que hayas cometido el hecho. A veces solemos pensar de nosotros como una persona que puede mantener el control de su propio comportamiento sin darnos cuenta que existen ciertos deseos de nuestro corazón que son capaces de arrebatarnos aún los sueños y los anhelos más preciados que hayamos guardado en nuestro corazón por años. Cada decisión que tomemos nos va a llevar a algún lugar, va afectar nuestro comportamiento y nuestro futuro, y hay algunas decisiones que son automáticas ya sea porque no las pensamos mucho o porque son impulsivas y permisivas, pero aún así, cada decisión tiene una consecuencia.
