La tensión en el Medio Oriente y la lucha global contra la inflación afectaron negativamente los mercados financieros, con la excepción de petróleo y oro, que actuaron como refugios seguros para inversores. En EE. UU., la economía se mantiene sólida, dando margen a la Fed para mantener políticas contractivas, mientras que los rendimientos de los bonos del Tesoro alcanzaron niveles no vistos en 15 años. A nivel local, la tensión previa a las elecciones en Argentina resultó en una brecha cambiaria récord, pese a lo cual los activos financieros locales mostraron un desempeño positivo. La semana inicia marcada por el inesperado triunfo electoral del oficialismo, posicionándolo como favorito para el balotaje.
