Algunos padres piensan que la educación financiera de sus hijos se dará de manera espontánea cuando estos sean adultos y tengan que tomar decisiones financieras, como escoger el fondo de pensiones cuando tengan su primer trabajo o manejar la deuda de su tarjeta de crédito.
Sin embargo, muchas personas llegan a la adultez sin saber hacer un presupuesto, sin ahorrar para la vejez y sin asegurar los bienes que con tanto esfuerzo han conseguido.