¡𝗘𝘅𝗶𝘀𝘁𝗲 𝘂𝗻𝗮 𝗳𝗼́𝗿𝗺𝘂𝗹𝗮 𝗽𝗲𝗿𝗳𝗲𝗰𝘁𝗮!
"Tiene que ser una tremenda angustia para que El Señor haya llorado sangre; era una tremenda condición humana y era el portador de la fórmula perfecta; Él llevaba en esa..., esa era la fórmula para la sanidad del mundo".
Extracto de la predicación por nuestro Hno. Abel Quipallán durante el servicio dominical 27/12/20
"Si el mundo hubiese aceptado esa fórmula, hoy día no habría Coronavirus..., pero no la aceptó, lo rechazó y estamos pagando el precio".
"(...)Pero podemos levantar las manos y alabar al Señor porque nosotros lo creemos y porque nosotros si que aplaudimos cuando Él viene, y vemos Sus obras y Sus maravillas. Eso no era solamente para atacar este virus, no, la fórmula, esa Sangre preciosa era la sanidad para todo; era la sanidad para el cáncer, la sanidad para la tuberculosis; era la sanidad para todas las patologías que hoy día amenazan a la humanidad".
"𝚍𝚒𝚌𝚒𝚎𝚗𝚍𝚘: 𝙿𝚊𝚍𝚛𝚎, 𝚜𝚒 𝚚𝚞𝚒𝚎𝚛𝚎𝚜, 𝚙𝚊𝚜𝚊 𝚍𝚎 𝚖𝚒́ 𝚎𝚜𝚝𝚊 𝚌𝚘𝚙𝚊; 𝚙𝚎𝚛𝚘 𝚗𝚘 𝚜𝚎 𝚑𝚊𝚐𝚊 𝚖𝚒 𝚟𝚘𝚕𝚞𝚗𝚝𝚊𝚍, 𝚜𝚒𝚗𝚘 𝚕𝚊 𝚝𝚞𝚢𝚊. 𝚈 𝚜𝚎 𝚕𝚎 𝚊𝚙𝚊𝚛𝚎𝚌𝚒𝚘́ 𝚞𝚗 𝚊́𝚗𝚐𝚎𝚕 𝚍𝚎𝚕 𝚌𝚒𝚎𝚕𝚘 𝚙𝚊𝚛𝚊 𝚏𝚘𝚛𝚝𝚊𝚕𝚎𝚌𝚎𝚛𝚕𝚎. 𝚈 𝚎𝚜𝚝𝚊𝚗𝚍𝚘 𝚎𝚗 𝚊𝚐𝚘𝚗𝚒́𝚊, 𝚘𝚛𝚊𝚋𝚊 𝚖𝚊́𝚜 𝚒𝚗𝚝𝚎𝚗𝚜𝚊𝚖𝚎𝚗𝚝𝚎; 𝚢 𝚎𝚛𝚊 𝚜𝚞 𝚜𝚞𝚍𝚘𝚛 𝚌𝚘𝚖𝚘 𝚐𝚛𝚊𝚗𝚍𝚎𝚜 𝚐𝚘𝚝𝚊𝚜 𝚍𝚎 𝚜𝚊𝚗𝚐𝚛𝚎 𝚚𝚞𝚎 𝚌𝚊𝚒́𝚊𝚗 𝚑𝚊𝚜𝚝𝚊 𝚕𝚊 𝚝𝚒𝚎𝚛𝚛𝚊".
𝗟𝘂𝗰𝗮𝘀 22: 42-44 ![]()