Dicen que la cara es el espejo del Alma; y de la misma manera en que el interior se refleja en el exterior a través de tus facciones, también es verdad, que consiguiendo una buena relajación de los tejidos y musculatura de la cara, se consigue transformar la sensación interior, adentrándonos en una experiencia de mayor serenidad y bien-estar.
Soy Javier de María y me gustaría mucho saber tu opinión.