Listen

Description

EL AYUNO
Desde la antigüedad, en las diferentes culturas ya practicaban el ayuno como un medio de purificación, sacrificio o acercamiento a lo divino.
Si se quiere hacer un ayuno por motivos de salud, existe una variedad de ayunos dependiendo de cada persona y su condición de salud para obtener los resultados que se desean: puede ser para desintoxicarse, para bajar de peso, para mejorar el metabolismo o la regeneración celular, todo esto bajo la supervisión de un médico.
Pero si se quiere hacer un ayuno con motivos espirituales, no tiene que ver con lo que se menciono anteriormente.
En el libro de Mateo nos dice:
“Cuando ayunéis, no seáis austeros, como los hipócritas; porque ellos demudan sus rostros para mostrar a los hombres que ayunan; de cierto os digo que ya tienen su recompensa. Pero tú, cuando ayunes, unge tu cabeza y lava tu rostro, para no mostrar a los hombres que ayunas, sino a tu Padre que está en secreto; y tu Padre que ve en lo secreto te recompensará en público.”
S. Mateo 6:16-18
El pueblo judío se había impuesto rituales, y practicaban el ayuno 2 veces por semana, aunque este no era un mandato de parte de Dios, es por eso que Jesús les advierte acerca de eso.
El ayuno debe hacerse para buscar a Dios, no para impresionar a otros ni como un simple ritual (Mateo 6:16-18).
Debe estar acompañado de oración, lectura de la Palabra y arrepentimiento (Joel 2:12).
El ayuno no lo hace más espiritual. Es un acto personal y voluntario, es por eso que no hay una forma o tiempo definido.
Un ayuno está relacionado directamente con un arrepentimiento y un corazón contrito y humillado delante de Dios, Salmo 51:17