En infinidad de cosas creemos que tenemos todo el tiempo del mundo y por ello postergamos lo que queremos hacer. En algunos otros casos creemos que no pasa nada porque hoy nos falte valor para hacer aquello que nos apasiona. Con los años te arrepientes de todas esas cosas que no hiciste, las que abandonaste mucho más que por aquellos que si hiciste y te generaron un aprendizaje.