Durante nuestras vidas hay un punto en el que con todo nuestro ser sentimos que el momento ha llegado. Algunas veces estamos tan distraídos que ni siquiera nos percatamos de lo que nuestro cuerpo nos está hablando. Cuando sí nos damos cuenta y sabemos que ya es hora, ponemos todos los pretextos que se nos ocurran y esperamos a tener la experiencia, conocimiento, habilidades, talentos que se van a ocupar. De tal suerte que no hacemos nada. Que todo esto no te pase a ti, en este epiaodio te comparto lo que puedes hacer.