Todo llega en el momento que tiene que llegar, en el momento perfecto, entender esto me ha tomado muchos años, sobre todo porque me consideraba una persona muy impaciente y aunque aún hay varias cosas en las que lo sigo siendo ya en la mayoría de aspectos he entendido que no me corresponde presionar o exigir que algo ocurra, lo que si me corresponde es generar acción masiva todos los días.