La moral no depende de la Ley, la Ley no hace al hombre más honesto.
Eso es una enseñanza que la Iglesia conoce bien, sólo el que se acerca a la vida y señorío en Cristo lo puede lograr.
La Civilización se ha beneficiado del empuje de la Iglesia por propagar el mensaje de Cristo.
Fray Nelson Medina nos lo explica.