Si es tu primera vez aquí. O si ya has estado, pero como si lo fuera. Te mando esta postal sonora de Nueva York desde Times Square.
Times Square es el punto más icónico de Nueva York, con permiso de la Estatua de la Libertad y el Empire State. Es ese kilómetro cero de la ciudad donde todos los puntos cardinales convergen. La primera vez que la visitas te quedas totalmente encandilado por sus letreros luminosos que resplandecen sin importar que sea de día o de noche. Aquí es donde cobra sentido pleno lo de “la ciudad que nunca duerme”. Muy cerca está el Black Iron Burger, una hamburguesería regentada por unos andaluces. En la puerta cuelga un cartel de Zagat, la Guía Michelín de los neoyorquinos, que alardea de haber sido “la mejor hamburguesa de Nueva York”. Hay que ser muy valiente para venir a esta ciudad y querer triunfar haciendo lo que mejor saben los americanos. Eso sí, a cada hamburguesa le han dado un toque personal.
Una hamburguesa y tres cervezas después, te pones al día. Necesitas compartir con alguien todo lo que te está pasando, para que te den un punto de vista desde fuera. Es catártico hablar con un buen amigo, una especie de terapia para soltar lastre. Ahora consigues transmitir tus emociones cuando hablas con alguien cercano, eres capaz de mostrarte tal y como eres. Antes, lo único que compartías era simplemente el éxito profesional. Por eso te veían como alguien distante, a quien solo le interesaba eso. Ahora has podido contactar contigo mismo, conectar corazón con mente y dejar de ser tan racional. Es cierto que, en este punto, surgen más preguntas que respuestas. Se te acumula el trabajo, pero no importa. Gracias a esta paz interior, tienes la confianza de que intentarás responderlas.
Gracias por escucharme. Un abrazo desde Nueva York.
