El 1% de la población dominicana ha sido vacunado. La meta del nuevo ministro de salud es 40 mil inoculaciones por día, Pero mas de cien mil en dos días de vacunación franca para adultos mayores de 70 años promedia 50 mil.
La preocupación real no es el alboroto de la clase media parejera que parece la menos acostumbrada a la organización pues las quejas han brotado en espacios propios de esas personas. No, hoy la preocupación es el flujo de vacunas porque aparentemente las grandes farmacéuticas occidentales no les interesan cumplir con países de diez millones de habitantes.
Al ritmo que vamos la existencia de vacunas se acaba en una semana y no sé si el gobierno de Abinader resistiría la presión del sistema de bocinas que aun prevalece.
Hoy se modifica el toque de queda y eso significa que se amplia la cantidad de establecimiento de servicios que podrá abrir al publico y el tiempo en la calle para una franja de la población que vive de la búsqueda.
Con 31 millones de dosis de vacunas compradas el gobierno de Abinader tiene que enfrentar dos cosas: El hambre de quienes no tienen fuente de ingresos a partir de la pandemia y la gula de un sector empresarial que en el peor de los escenarios sigue haciendo dinero tan campante como el hombre aquel.
