El gobierno ha reajustado gasto por 70 mil millones que son menos del 8% del presupuesto. Falta más y debe identificarlo para que pueda exhibir que comparte el ajuste con la población. La exigencia de la población hacia una buena gestión supera lo legal para adentrarse en lo ético. Hacer negocios con el gobierno no está mal, el tema es que usted no puede aspirar a ser gobierno desde la posición de contratista aventajado del gobierno, eso es lo que no entendió Kimberly Taveras y los cientos de Kimberly masculinos que deben andar haciendo cocote con la administración publica. Trafico de influencias quizá no es delito pero lo parece. Sobre todo si le da una ventaja que todos creíamos que era exclusiva de los suertudos del PLD.