Al inicio de este episodio, pretendíamos hablar sobre los efectos que el cutting o los intentos suicidas de los hijos pueden tener sobre sus padres y demás personas cercanas. Sin embargo, la plática nos fue llevando a un tema importantísimo: la ambivalencia. Es decir, las personas importantes para nosotros son receptoras tanto de nuestro amor más hermoso como de nuestro odio más destructivo. Poniéndolo más en concreto, los hijos aman a sus padres, pero también hay momentos en que los odian profundamente. Lo contrario también es verdad: los padres pueden adorar a sus hijos, pero también hay momentos en que les desesperan y quieren deshacerse de ellos. Reconocer los sentimientos de amor y odio, que están en nuestro interior y son reales, es fundamental para no llevar nuestro odio al acto. Este tema central nos llevó a pensar otros tópicos relevantes, como el aborto o lo que es la transferencia y la contratransferencia en psicoanálisis.
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