Palabra de Dios: “Tierra, no temas; alégrate y gózate, porque Jehová hará grandes cosas. Animales del campo, no temáis; porque los pastos del desierto reverdecerán, porque los árboles llevarán su fruto, la higuera y la vid darán sus frutos. Vosotros también, hijos de Sion, alegraos y gozaos en Jehová vuestro Dios; porque os ha dado la primera lluvia a su tiempo, y hará descender sobre vosotros lluvia temprana y tardía como al principio. Las eras se llenarán de trigo, y los lagares rebosarán de vino y aceite. Y os restituiré los años que comió la oruga, el saltón, el revoltón y la langosta, mi gran ejército que envié contra vosotros.
Comeréis hasta saciaros, y alabaréis el nombre de Jehová vuestro Dios, el cual hizo maravillas con vosotros; y nunca jamás será mi pueblo avergonzado. Y conoceréis que en medio de Israel estoy yo, y que yo soy Jehová vuestro Dios, y no hay otro; y mi pueblo nunca jamás será avergonzado.” Joel 2:21-27
Perlas: Más y más promesas del Señor para Sus hijos. Dios nos invita a no temer porque lo único que vamos a ver es Su gloria. Después de tiempos muy difíciles, permitidos por el Señor con propósitos santos, después de haber aprendido TODO lo que Él quería que aprendiéramos, después de esto lo único que veremos será Su gloria. Recibamos este río de promesas del corazón del Padre a nuestros corazones:
-Tendremos gozo y alegría en lugar de temor.
-Veremos al Señor hacer grandes cosas.
-Veremos todo en nuestra vida reverdecer.
-Daremos fruto.
-Disfrutaremos Su lluvia de bendición en todo tiempo.
-Su provisión será sobreabundante.
-Nuestros ojos verán la restitución de todo lo que el enemigo nos robó.
-Viviremos más que satisfechos.
-Alabaremos Su nombre por todas Sus maravillas que hará con nosotros.
-Nunca más seremos avergonzados.
-Nunca más dudaremos de la Presencia de Dios, ni de Su poder, ni de Sus promesas, ni de Su fidelidad para cumplirlas.
Oración: Padre, lo único que puedo decir en este momento es: Ayúdame a creer sin dudar en todo lo que me prometes. Ayúdame a que no me falte la fe. Ayúdame a esperar sin desfallecer y ayúdame a aprender todo lo que necesito aprender en este tiempo. Amén.
Reto del día: Aprópiate de todas estas promesas. Escríbelas de manera personalizada, son para ti. Ojalá sea una hoja especial, aparte, que puedas leérselas a tu alma todos los días. La fe viene por el oír, y el oír, y el oír la Palabra de Dios. (Romanos 10:17)
