Cuando somos emprendedor@s, estamos acostumbrad@s a hacerlo todo nostr@s. Al principio quizá es necesario si no tenemos los recursos, pero llega un momento que la única forma de seguir creciendo es tener ayuda.
Tengo much@s clientes que se quejan de lo difícil que es encontrar ayuda o se quejan de que nadie en su equipo puede hacer lo que ell@s y por eso tienen que seguir haciéndolo a pesar de su agotamiento, desidia, estrés, etc.
El problema de tener ayuda no es realmente encontrarla sino estar dispuest@ a recibirla. ¿Es tu caso?