Visión vs. foco. Objetivo vs. paso a dar. Esto es algo que tendemos a confundir con mucha frecuencia. Especialmente cuando nos ponemos objetivos ambiciosos.
¿El problema? Si no tenemos claridad de uno y otro en nuestro negocio, corremos el riesgo de perdernos en el camino, bloquearnos o dar pasos en falso o al aire.