Apocalipsis fue escrito en forma de carta que era lo acostumbrado en esa época cuando no había Whatsapp, e-mails ni siquiera telégrafo.
Se llamaban epístolas, eran ampliamente usadas tanto por civiles como por gobernadores y reyes. Las epístolas en su estructura empezaban con la identificación del remitente, sus credenciales, y luego se mencionaba al destinatario, se dirigían palabras afectuosas de saludos y se mencionaba el propósito de la carta, a continuación se escribía el mensaje propiamente tal, que dependiendo del tipo de mensaje, éste podía ser escrito en lenguaje simple, en poesía, en acertijos o encriptado, en el caso de Apocalipsis es en lenguaje críptico-simbólico. Las epístolas terminaban con saludos y sello o firma del remitente.
El lenguaje críptico simbólico era ampliamente usado para transmitir mensajes a iniciados, lo que dificultaba su entendimiento a cualquier otro lector que no fuera el destinatario y que no estuviera familiarizado con la simbología.
Recordemos que las epístolas o cartas se escribían en rollos de pergaminos, o papiros. Eran depositadas en bolsas de cuero o vasijas de cerámica o de metal, para protegerlas en el trayecto de envío. Las envolturas se sellaban a fin de resguardar la privacidad y asegurar al receptor su autenticidad.
En nuestra Biblia tenemos varias epístolas o cartas, si las observáis, encontraréis similitudes en el tipo de saludos de nuestros primeros hermanos, que generalmente usaban las palabras “gracia y paz”.
El saludo gracia en griego “jaris” es una variante de “jairein”, que era el saludo común de la población grecohablante. Podéis ver que se menciona en Hechos 23:26 cuando Claudio Lisias saluda al gobernador Félix.
El saludo paz, en griego “eirēnē” lo usaba el pueblo judío con el significado del hebreo “šālôm”.
Así en el saludo epistolar gracia y paz, se incluía tanto a judios como a gentiles.
versículos
y su relevancia para nosotros hoy.
Bendiciones