Una distopía no es más que una proyección de lo que pensamos que, al paso que vamos, puede llegar a ser nuestra sociedad. Pero no es un ensayo. Es una narración. Hay, por tanto, un escenario distópico en el que se representa un episodio de la vida de una o varias personas.
No quiero desvelarte las claves de «P. En la ciudad abrasada». Sobre todo porque las mías no tienen por qué ser las tuyas. Solo te diré que cuando lo escribí tenía en mente cosas muy parecidas a problemas muy actuales como la «emergencia climática» o las invasiones de Ucrania o Gaza. Pero también por algo mucho más personal. Algo que resume muy bien José Larralde en su canción (que puedes escuchar en YouTube) «Mejor me voy».
