Les quise contar o compartir uno de las tantas reflexiones que me trae el ser madre. Invitarlos a por un momento estar presentes. Darse cuenta en cuerpo, emoción de: cuanto has crecido mi niña (o), cantar juntos, reír con ellos desde la honestidad.
Se nos escapan segundos de apreciar y agradecer lo único y consentidor que es Dios, el universo, tu energía como lo concibas cada día , por muchos momentos lo ignoramos.
Gracias por estar y espero encuentren estos momentos mágicos como yo el día de ayer. Les abrazo.