Hay novelas que parecen en la historia de los ancianos que vivieron en las heladas tierras de Alaska tiene el sabor de esas enseñanzas que los hijos de boca de sus padres en las largas noches de inviernos una anciana dos la ládusa que la ládusa que la ládusa que la abandonada y las fríodas a de e inanición. Tras el desconcierto inicial, el espíritu de supervivencia se impuso y, olvidados sus achaques, las dos lucharon lucharon venceron para la muerte. Así balcón cualidades que salvar la vida y saberse frente a sí mismas y frente a los demás.