En el Antiguo Testamento vemos como Dios da indicaciones a su pueblo respecto al trabajo de la tierra, cómo cosechar y también sobre el jubileo; todo esto como una lección de dependencia total en Él y una expresión de misericordia. Además, expresa que si se toman por obra sus indicaciones, su Shalom los cubrirá. ¡El Shalom expresa el reino de Dios, ese reino que Jesús instaura en su ministerio en la tierra!