En esta edición de El Reto de la Curiosidad, Waldo Molina nos trae una joya literaria tan breve como sorprendente: el que se considera el poema más corto del mundo.
Y lo más curioso es que no proviene de un poeta tradicional, sino del legendario boxeador Muhammad Ali, quien con solo dos palabras dejó una huella profunda. Un instante de poesía que encierra más de lo que aparenta.