La frase "no des perlas a los cerdos" es un dicho que tiene su origen en la Biblia, concretamente en Mateo 7:6 del Nuevo Testamento, que dice: "No deis lo santo a los perros, ni echéis vuestras perlas a los cerdos, no sea que las pisoteen y se vuelvan y os despedacen."Este proverbio es metafórico; sugiere no ofrecer algo valioso (tanto material como inmaterialmente, como sabiduría, consejo o ayuda) a quienes no lo apreciarán, comprenderán o respetarán. Las "perlas" simbolizan las cosas ...