José Mujica fue presidente de Uruguay, ex guerrillero, preso político, campesino y filósofo de trinchera. Pero sobre todo, fue una rareza: un político que eligió vivir con poco, decir lo que pensaba y gobernar desde la sencillez más radical.
En este episodio, hablamos con Lore y Candy sobre lo que significa el poder cuando se ejerce con humildad, de cómo un hombre puede cambiar el mundo sin dejar de ser parte de él. Hablamos de renuncias, coherencia, ternura y dignidad.
Porque Mujica no necesitó un traje caro ni un discurso perfecto. Le bastó con una flor en la mano y la convicción de que vale más un abrazo que un aplauso.