Deuteronomio 14: Fondo de emergencia.
Deuteronomio 14:28-29:
“Al final de cada tres años, sacarás todo el diezmo de tus productos de aquel año y lo guardarás en tus ciudades. Entonces vendrán el levita que no tiene parte ni heredad contigo, el forastero, el huérfano y la viuda que haya en tus ciudades. Ellos comerán y se saciarán, para que el SEÑOR tu Dios te bendiga en toda obra que hagas con tus manos.
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Dios le había dado un orden perfecto de convivencia al pueblo de Israel. Dios había establecido un sistema económico y financiero para que todo el pueblo fuera bendecido y nunca les faltara nada.
El diezmo fue una acción de fe que Abraham comenzó a hacer delante de Dios pero cuando el pueblo de Israel fue establecido, Dios introdujo este acto de fe como parte de los reglamentos y ordenanzas de Dios hacia el pueblo de Israel.
Había diferentes formas de ofrecer el diezmo ante el sacerdote, y la ley indicaba la forma de administrarlo, las porciones que le correspondían a cada uno, tanto al que ofrenda como al sacerdote.
Aquí leemos que existía un fondo especial para poder ayudar a los necesitados y para sustentar al levita que servía en el sacerdocio.
Notemos que Dios no elimina la pobreza o evita las calamidades como la pérdida del esposo, o haber nacido sin padres o la necesidad de salir de su país y ser extranjero. Sin embargo, Dios ya había establecido el orden para que en Israel se pudiera sustentar a estas personas con necesidades, y para que nunca faltara el sustento a la tribu dedicada al servicio del templo.
Si cada 3 años cada israelita separaba los primeros frutos de sus cosechas y daban la décima parte de sus ganados y los guardaban en un lugar especial, este fondo sería la fuente de ayuda para que nadie aguante hambre.
Tristemente, al pasar los años, ellos fueron negligentes para cumplir esta ley, fueron avaros y desordenados, y al final la pobreza invadió al pueblo de Israel por causa de la injusticia e infidelidad del pueblo.
Este principio de ahorrar para las necesidades podemos ponerlo en práctica en nuestros hogares. Debemos primero asignar un fondo de emergencia o abrir una cuenta de ahorro para que nos ayude en tiempos difíciles antes de comprar algo que deseamos, antes de invertir o gastar en otras cosas que queremos adquirir.
Se recomienda comenzar a crear un fondo que pueda cubrir nuestras necesidades básicas entre 3 y 6 meses. El pago de la casa, el costo de la energía, el gas, la alimentación y el transporte.
Vivimos en un mundo injusto e imperfecto, y los momentos difíciles pueden llegar inesperadamente pero si tú comienzas a adelantarte, preparándote a guardar este fondo y no lo tocas, siendo prudente y responsable, entonces tendrás para pagar tus necesidades básicas y así tu familia no pasará necesidad mientras pasa el momento difícil y podrás retomar el control de tu vida al recuperarte, ya sea de un accidente o tienes que buscar otra fuente de trabajo o reparar tu vehículo.
No uses este fondo para prestar dinero al compadre, para comprar el último modelo de televisor o la última tecnología que no necesitas. Solo es para emergencias. Para lo demás, abre otro fondo de ahorro.
A diferencia de Israel que dejó de llevar el diezmo y las ofrendas delante de Dios y también dejaron de aportar para este fondo en sus ciudades, nosotros sigamos siendo fieles al Señor con nuestros diezmos y ofrendas, y también usando el dinero que ganamos para crear este fondo especial y no malgastar el dinero en cosas de lujo que tanto deseamos comprar. Todo en su orden. Después del fondo podrás invertir en otras cosas como ahorrar para la cuota inicial de un apartamento, comprar un carro, ahorrar para un viaje de vacaciones, en un nuevo celular porque el que tienes no funciona o a invertir en acciones.
¡También debes tener en cuenta que un fondo de emergencia no es una tarjeta de crédito! No dependas de un crédito bancario para usarlo en emergencias. El punto es tener el fondo en efectivo disponible para que no añadas más cargas a lo que estás o estarás enfrentando.
Seamos sensatos y sabios a la hora de proteger a nuestras familias ante los momentos duros y temporales, que con este fondo puedes evitar que falte alimento, medicina o techo para tu familia. Aunque tengamos ciertas ayudas sociales de los gobiernos, no debemos esperar a que ellos solucionen nuestros problemas. Si podemos hacerlo con la ayuda de Dios, entonces comencemos ya y no cuando llegue sorpresivamente la necesidad y nos encuentre sin alguna forma de enfrentarla.
Soy tu amigo y hermano Eduardo Rodríguez. Que el Señor provea siempre para tus necesidades y te dé sabiduría para utilizar sabiamente estos recursos.
🇺🇲
Deuteronomy 14: Emergency fund.
Deuteronomy 14:28-29:
“At the end of every third year you shall bring out the tithe of your produce of that year and store it up within your gates. And the Levite, because he has no portion nor inheritance with you, and the stranger and the fatherless and the widow who are within your gates, may come and eat and be satisfied, that the Lord your God may bless you in all the work of your hand which you do.
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God had given a perfect order of coexistence to the people of Israel. God had established an economic and financial system so that all the people would be blessed and never lack anything.
The tithe was an act of faith that Abraham began to do before God but when the people of Israel were established, God introduced this act of faith as part of the regulations and ordinances of God towards the people of Israel.
There were different ways to offer the tithe before the priest, and the law indicated the way to administer it, the portions that corresponded to each one, both to the one who offered and to the priest.
Here we read that a special fund existed to help those in need and to support the Levite who served in the priesthood.
Let us note that God does not eliminate poverty or prevent calamities such as the loss of a husband, or being born without parents or the need to leave your country and be a foreigner. However, God had already established the order so that these people in need could be sustained in Israel, and so that the tribe dedicated to the service of the temple would never lack sustenance.
If every 3 years each Israelite separated the first fruits of their crops and gave a tenth of their cattle and kept them in a special place, this fund would be the source of help so that no one could go hungry.
Sadly, as the years passed, they neglected to comply with this law, they were greedy and disorderly, and in the end poverty invaded the people of Israel because of the injustice and infidelity of the people.
We can put this principle of saving for necessities into practice in our homes. We must first assign an emergency fund or open a savings account to help us in difficult times before buying something we want, before investing or spending on other things we want to acquire.
It is recommended to start creating a fund that can cover our basic needs between 3 and 6 months. The payment of the house, the cost of energy, gas, food and transportation.
We live in an unfair and imperfect world, and difficult times can come unexpectedly, but if you start to anticipate, preparing to save this fund and do not touch it, being prudent and responsible, then you will have to pay for your basic needs and so your family will not have needs while the difficult moment passes and you will be able to take control of your life when you recover, either from an accident or you have to find another source of work or repair your vehicle.
Do not use this fund to lend money to the godfather or buddy, to buy the latest model of television or the latest technology that you do not need. It is only for emergencies. For the rest, open another savings fund.
Unlike Israel who stopped bringing tithes and offerings before God and also stopped contributing to this fund in their cities, let us continue to be faithful to the Lord with our tithes and offerings, and also using the money we earn to create this special fund and not waste money on luxury things that we so much want to buy. Everything in its order. After the fund you can invest in other things such as saving for the initial payment of an apartment, buying a car, saving for a vacation trip, a new cell phone because the one you have does not work or investing in stocks.
You should also keep in mind that an emergency fund is not a credit card! Do not depend on a bank credit to use it in emergencies. The point is to have the cash fund available so you don't add more burdens to what you are or will be facing.
Let's be sensible and wise when it comes to protecting our families in the face of hard and temporary moments, that with this fund you can avoid a lack of food, medicine or shelter for your family. Although we have certain social assistance from governments, we should not wait for them to solve our problems. If we can do it with God's help, then let's start now and not when the need suddenly arrives and finds us without any way to face it.
I am your friend and brother Eduardo Rodríguez. May the Lord always provide for your needs and give you wisdom to use these resources wisely.
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