Hebreos 4:6-16 RVA2015
Puesto que falta que algunos entren en el reposo, ya que aquellos a quienes primero les fue anunciado no entraron a causa de la desobediencia, Dios ha determinado otra vez un cierto día, diciendo por medio de David: “Hoy”, después de tanto tiempo, como ya se ha dicho: Si escuchan hoy su voz, no endurezcan su corazón. Porque si Josué les hubiera dado el reposo, no se hablaría después de otro día. Por tanto, queda todavía un reposo sabático para el pueblo de Dios. El que ha entrado en su reposo, también ha reposado de sus obras, así como Dios de las suyas. Hagamos, pues, todo esfuerzo para entrar en aquel reposo, no sea que alguien caiga en el mismo ejemplo de desobediencia. Porque la Palabra de Dios es viva y eficaz, y más penetrante que toda espada de dos filos. Penetra hasta partir el alma y el espíritu, las coyunturas y los tuétanos, y discierne los pensamientos y las intenciones del corazón. No existe cosa creada que no sea manifiesta en su presencia. Más bien, todas están desnudas y expuestas ante los ojos de aquel a quien tenemos que dar cuenta. Por tanto, teniendo un gran sumo sacerdote que ha traspasado los cielos, Jesús el Hijo de Dios, retengamos nuestra confesión. Porque no tenemos un sumo sacerdote que no puede compadecerse de nuestras debilidades, pues él fue tentado en todo igual que nosotros pero sin pecado. Acerquémonos, pues, con confianza al trono de la gracia para que alcancemos misericordia y hallemos gracia para el oportuno socorro.
En este capítulo el escritor continúa persuadiendolos para que no seamos rebeldes al llamamiento de Dios sino que seamos sabios en entender que estamos en el tiempo de la gracia y que hoy es el día de salvación.
A veces posponemos el momento en que debemos entregar nuestras vidas a Dios porque pensamos que debemos dejar muchas cosas atrás que no le agradan a Dios. Pensamos que es con nuestras propias fuerzas. También pensamos que Dios no nos puede perdonar hasta que dejemos cosas que sabemos que no son correctas.
Sigamos el consejo que aquí aprendemos: no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy! Entrégale el control de tu vida hoy a Jesús y Él te dará el reposo para tu alma que tanto buscas y que no has encontrado en el mundo.
Puedes hacerlo con confianza, porque aquí aprendemos que Jesús también fue tentado en todo! Sí, toda clase de tentaciones que atacan al ser humano, toda debilidad que sufrimos Jesús las sufrió, con las diferencia que Él no cayó en la tentación. Esa victoria sobre Satanás nos da el derecho de vencer toda tentación que enfrentemos!
Deja que la palabra de Dios sea la que te enseñe, te corrija y te ayude a aclarar tus ideas, pensamientos y sentimientos, para que puedas vivir una vida victoriosa en Cristo Jesús.
No te escondas del llamado del Señor. Si Dios mira todas las cosas, sabe todas las cosas, y conoce tu nuestras vidas, ¿Crees que podemos esconder lo hay en nuestra mente y corazón?
Más bien aceptemos que Él está llamando a hogares completos para transformarlos y usarlos para su Reino, desde el más pequeño hasta el más grande, no importando la edad o lo que hayamos hecho en el pasado.
Consideremos:
Estoy dilatando el tiempo para aceptar el llamado de entregar mi vida a Jesús?
Soy tu amigo Eduardo Rodríguez. Que el señor Jesús escuche tu oración. No olvides leer el capítulo completo y compartir este devocional con tus contactos en tus redes sociales.
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