La Biblia no nos da mucha información acerca de este rey. Y aunque se enfatiza que murió joven (tan solo tenía 41 años de edad), no se nos revela cuál fue la causa de su muerte. ¿Qué sabemos acerca de él? La Palabra de Dios solo nos dice cosas buenas acerca de él. Se nos dice que construyó una puerta grande y hermosa en el Templo de Dios. También fortificó la parte más alta del muro de la ciudad. También fue victorioso en su guerra contra los amonitas. Todas éstas son señales de la bendición de Dios. Dios estaba con él. Jotam fue fiel a Dios. Pero la nota triste de su reinado es que el pueblo se seguía corrompiendo espiritualmente. Lo típico en la Biblia es que si el rey es malo, el pueblo es peor. Pero aquí tenemos un caso atípico: un rey bueno, pero un pueblo corrompido. ¿Por qué? Quizás porque siempre que se siembra la semilla del mal (como pasó con Atalía, Joás, y el final del reinado de Amasías), por más reformas y cosas buenas que hagan los reyes posteriores, siempre quedan raíces o consecuencias negativas. La cizaña, una vez que ha sido esparcida, no se arranca con facilidad. Una nota que se repite mucho en estos capítulos de la Biblia, es que el pueblo seguía ofreciendo incienso en los lugares altos. Es decir, el pueblo siempre tuvo una tendencia a la idolatría. Si tenían el Templo, que era el lugar donde debían adorar a Dios...¿para qué ir a "adorar" a los lugares altos? Jotam murió muy joven, y no sabemos el por qué. Pero quizás eso ya nos dice algo. No siempre el Señor nos va a dar todas las respuestas. Muchas personas malas viven vidas bastante largas. Muchos justos muren a corta edad. Lo importante es que siempre vivamos para el Señor durante los años que Él nos conceda. Si hacemos esto, heredaremos la vida eterna. Mañana vamos a ver que pasó con el hijo de Jotam, que fue uno de los peores reyes de Judá. Mientras tanto, yo te invito a que tú decidas caminar con el Señor, y hacer lo recto delante de Él. No te apartes de Él, ni te entregues a la idolatría. Que el Señor te bendiga.