Este capítulo es realmente asombroso, y nos muestra el cambio de corazón que ocurrió en la vida de uno de los monarcas más poderosos de la historia. Nabucodonosor había construido la gran Babilonia, con sus ziggurats, palacios y jardines colgantes. Era una maravilla. Pero se decretó sobre él que sería quitado de su reino por un periodo de 7 años. Y se le dijo que su reino le sería devuelto su reino solo si reconocía que el verdadero gran gobernante de la tierra era el Altísimo. Nabucodonosor se arrepintió y se dio cuenta del poder y de la soberanía del Dios de Israel. Y fue él quien escribió este capítulo de la Biblia. Dios pone y quita reyes. Dios es quien controla el destino del mundo. Reconoce a Dios. Humíllate en su presencia. Arrepiéntete de tus pecados. Has justicia y actúa con buen juicio. No olvides que es el cielo quien gobierna la tierra. Que el Señor te bendiga.