Es quizás el consejo más extraño que podamos leer en la Biblia. ¿No ser demasiado bueno? ¿No ser demasiado sabio? En la vida, no van a faltar personas que van a buscar aprovecharse de ti. Es posible que te encuentres con personas que por verte sabio, te quieran hacer la guerra. Nuestra meta siempre debe ser la sabiduría y la bondad. Debemos esforzarnos por reflejar a Dios. Pero creo que Salomón nos está invitando a ser equilibrados. No busques enemigos innecesarios. No te destruyas. Pidámosle a Dios sabiduría, equilibrio, para vivir una vida plena y llena de fe en Él y en su dirección y cuidado. Que el Señor te bendiga.
