Cristo Jesús es superior a los ángeles, a Moisés, y también a Aarón. Aarón, hermano de Moisés, fue elegido por Dios como Sumo Sacerdote. La función del Sumo Sacerdote era presentarse delante de Dios por el pueblo. Es decir, representaba al pueblo delante de Dios. Su deber era interceder por el pueblo: rogar el perdón en base a un sacrificio muy especial que debía presentar en el día de Yom Kippur. Pero ahí está la diferencia entre Aarón y Jesús. Aarón, como todos los seres humanos, era un pecador. Y antes de presentarse delante de Dios debía presentar una ofrenda por sus propios pecados. Jesús, en cambio, nunca pecó. Por lo tanto Jesús no tuvo que presentar una ofrenda por sí mismo. Jesús era la ofrenda. Él era el cordero de Dios que quita el pecado del mundo. Pero también Él es nuestro Sumo Sacerdote, quien ahora se está presentando delante de Dios para interceder por nosotros. Según la Biblia, Él es el ÚNICO MEDIADOR entre Dios y los hombres (1 Timoteo 2:5). Nadie más se presenta delante de Dios para interceder por nosotros. Solo Cristo Jesús. Hoy muchos están celebrando Yom Kippur, y están rogando el perdón de sus pecados. Pero la Biblia es clara: solo se puede alcanzar el perdón mediante la fe en el Hijo de Dios. Solo podemos ser perdonados si creemos en Jesús. Y no solo hay que creer. También hay que obedecer. Jesús es autor de Salvación Eterna para los que le obedecen. Si no crees en Jesús, créeme, estás solo. Nadie va a interceder por ti. Todos necesitamos un abogado delante de Dios. Todos somos pecadores. Nuestra única esperanza es Jesús. Cree en Él. Y obedécele. Que el Señor te bendiga.
