¿Cómo reaccionamos cuando se nos lee la Palabra de Dios? Dios le dijo a Jeremías que escribiera todas sus profecías en un rollo. Con la ayuda de Baruc, Jeremías obedeció y luego le pidió a Baruc que fuera al Templo y leyera estas palabras a todo el pueblo. Los funcionarios del Rey pidieron que Baruc les leyera también a ellos estas profecías, y Baruc así lo hizo. Y muchos de ellos temblaron ante la Palabra de Dios. Y decidieron que el Rey también debía escuchar estos mensajes. Pero lamentablemente el Rey Joacim no respondió favorablemente a la Palabra de Dios. Era diciembre, pleno invierno en Jerusalén, y el Rey estaba frente a un gran brasero. Y cada vez que se leía una porción del rollo, él lo cortaba y lo quemaba en el fuego. La reacción de Joacim fue muy diferente a la reacción de su padre, el Rey Josías. ¿Cómo reaccionas cuando alguien lee para ti la Palabra de Dios? ¿Tiemblas ante sus mensajes? ¿O te da igual? Tu reacción a la Palabra de Dios, y las decisiones que tomes frente a ella van a definir tu futura salvación o perdición. Elige bien. Que el Señor te bendiga.