Por fin la hora había llegado. Muy pronto Jesús entraría en su gloria. Y eso, ¿qué significa? Jesús estaba hablando a cerca de su muerte. Jesús sabía que esa era la única forma de salvarnos. Era su gloria complacer a su Padre celestial. El capítulo de hoy nos invita a seguir el ejemplo de Jesús. Debemos estar dispuestos a morir y a renunciar a todo lo que nos ate a este mundo. Solo así, podremos dar muchos frutos. Que el Señor te bendiga.