Esta es una de las parábolas más conocidas de Jesús. Surge de una pregunta teológica: ¿Quién es mi prójimo? Si el mandamiento me ordena amar a mi prójimo como a mi mismo, ¿quién es él? ¿Es mi vecino? ¿Es mi semejante? ¿Solo debo ayudar al que es igual a mi? Te invito a escuchar este breve mensaje de la Palabra de Dios y a que lo compartas con tus amigos y seres queridos. Que el Señor te bendiga.