La sabiduría se va demostrar en nuestras palabras; en nuestras respuestas. Por eso Salomón llega a decir que cuando una persona permanece en silencio, todos podrían llegar a pensar que es sabia. ¿Cómo respondes a los insultos, a las provocaciones, a una palabra insensata? Tu respuesta, va a demostrar si eres sabio o si eres necio. El sabio va a responder con suavidad. Una respuesta blanda. Esto no es una señal de debilidad. Es una señal de que valoramos la paz y la resolución de conflictos. El sabio va a pensar muy bien antes de responder. Y a veces, incluso, es mejor no responder. El sabio sabe cuando callar. Sabe cuando va a ser escuchado, y cuando no. Y si no va a ser escuchado, mejor no hablar. Que Dios nos llene de sabiduría para saber responder. Que el Señor te bendiga.
