Se ha catalogado como el juicio antimonopolio más grande del siglo. Comenzó hace dos semanas, y enfrenta al Departamento de Justicia de Estados Unidos contra Google. Y su desenlace, como han apuntado varios expertos, podría tener profundas consecuencias en la manera en que nos relacionamos con internet. Partiendo por cómo buscamos la información.
Se trata del primero de una serie de casos que enfrentarán a las autoridades con las grandes compañías tecnológicas que dominan el mercado. En un caso aparte, el gobierno federal de Estados Unidos demandó a Google por neutralizar o eliminar a sus rivales en el área de la publicidad online. Lo mismo hizo hace unos meses, la Comisión Europea al acusar a la compañía de abusar de su posición dominante en ese mercado. Además, la autoridad de Comercio de Estados Unidos presentó un caso contra Meta, la compañía propietaria de Facebook, por sus adquisiciones de Instagram y WhatsApp; y se espera que pronto lo haga contra Amazon por sus prácticas en su tienda en línea.
En particular, el juicio que comenzó hace dos semanas tiene que ver con el mercado de los buscadores online, donde Google es claro dominador. En el centro del caso están los acuerdos alcanzados por la compañía con una serie de proveedores que le han dado preferencia a su buscador, a cambio de una retribución económica. Para la compañía tecnológica, se trata de usar bien las armas del mercado para posicionar su producto, y argumenta que no existen impedimentos para que los usuarios puedan cambiar el buscador fijado por defecto en sus dispositivos; para el Departamento de Justicia, se trata de un abuso de su posición dominante.
El periodista Alejandro Alaluf, especialista en tecnología y panelista de radio Duna, comenta la importancia de este juicio y cómo los reguladores buscan enfrentar a las poderosas compañías tecnológicas que dominan Internet. Y la historia comienza en 1998, con el emblemático caso antimonopolio contra Microsoft.
