En el partido inicial de Atenas 2004, Manu Ginobili lideró a su equipo a una épica victoria ante Serbia y Montenegro, el campeón mundial de ese entonces. Con una acrobacia que se conoce como “La Palomita del Siglo”, el astro del baloncesto argentino selló una victoria en un partido que parecía perdido a escasos tres segundos del final. Este triunfo marcaría el comienzo de la generación dorada del baloncesto argentino.
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