Como latinoamericana siempre se me inculcó que estar soltera era algo malo, por lo tanto, por mucho tiempo mi solteria era más bien un estado de espera y búsqueda de otra pareja. Tras transcurrir el camino de cambiarle el sentido a ese tiempo para mi, he encontrado dicha y plenitud conmigo misma, aunque el camino no haya sido el más fácil. Mariela Duarte me acompaña en esta carta para compartir contigo cómo ha lucido nuestra historia y cómo hemos alcanzado a tener una soltería sana.