Vivimos conjugando nuestro día a día con verbos carentes de acción, tapando las heridas con curitas; tratándonos como muñecos de trapos, colocándonos parches o parapetos en lugar de sanar de verdad. "Estoy saliendo con este chico, "por mientras llega mi príncipe azul". "Mientras consigo un mejor trabajo estoy aquí" "Algo es algo" "Peor es nada" ¿Te suena esto familiar? ¿Qué pasa cuando vivimos en el "Por mientras"?
Con amor,
Stef Nieto
Derechos de autor: Stef Nieto
Este Podcast llena gracias a Petróleos Delta. Siempre cerca de ti