HAY TRES COSAS QUE NOSOTROS DEBEMOS
HACERNOS HACEDORES: LA PALABRA, LA RELACION
CON EL ESPIRITU SANTO, Y LA ORACION.
Romanos 8:26
“Y de igual manera el Espíritu nos ayuda en nuestra debilidad; pues
qué hemos de pedir como conviene, no lo sabemos, pero el Espíritu
mismo intercede por nosotros con gemidos indecibles.”
¿Qué ES EL GEMIR DEL ESPIRITU SANTO?:
Es cuando él (El Espíritu) toma de lo profundo, el control dado y aunque no entiendas porque, se produce un cambio en el ambiente espiritual. muchas veces va acompañado de lágrimas y en ocasiones es una agonía sin aparente razón. Como diría Pablo “Verdad digo en Cristo, no miento, y mi conciencia me da testimonio en el Espíritu Santo”
(Romanos 9:1) No son palabras, es indecible (inexplicable).
¿Dónde RESIDE LA IMPORTANCIA DE ESTO? ESTA EN
NUESTRA DEBILIDAD:
Por esa razón, él, EL ESPIRITU, es el que va
a generar la oración más perfecta. Es Dios Espíritu en mí orando en
forma perfecta al Padre. Muchas veces al gemir en nosotros se
recibe en segundos una gran descompresión de cargas y según la
palabra misma del contexto de romanos 8 permite el fluir del poder
creativo de Dios para que se ejecute lo que está en sus planes.
PERFECTA KOINONIA
Paz...