Nuestros sistema nervioso, nuestro cerebro, no sabe diferenciar lo bueno y lo malo simplemente lo hace determinando si es cómodo o incomodo y en base a eso activa respuestas fisiológicas para reaccionar. Si el cerebro sabe por experiencia que recibir golpes por 20 minutos seguidos es sin duda algo malo para tu cuerpo, ¿cómo hay gente que elige pelear como deporte? Bueno, porque ese mismo cerebro es capaz de a través del pensamiento y la razón entender que a veces lo incomodo no siempre es lo malo y que debe "push through".