En este capítulo de Las Ácidas nos vamos directas a Nueva York para rendir homenaje a la reina y la heredera del humor ácido neoyorquino: Dorothy Parker y Fran Lebowitz. Parker convirtió la mala leche en arte fino; Lebowitz la transformó en un estilo de vida y en una opinión perpetua sobre absolutamente todo. Juntas son como una Manhattan sin hielo: fuertes, elegantes y capaces de dejarte temblando.