Mackenzie Cowell, una estudiante de cosmética de 17 años, desapareció en Wenatchee, Washington, el 9 de febrero de 2010. Cuatro días después su cuerpo fue encontrado en el río Columbia. La autopsia reveló que había sido estrangulada, apuñalada y sometida a violencia física. La investigación carecía de pistas claras, pero una serie de eventos y pruebas circunstanciales, incluyendo el testimonio de un informante y la identificación de ADN en una cinta adhesiva, llevaron a la sospecha y eventual arresto de Christopher Scott Wilson, un compañero de clase con un interés macabro en la muerte y los asesinos en serie.
