La implosión del Imperio Bizantino en 1204 provocó el surgimiento de una serie de territorios latinos dirigidos por los cruzados y otros de fidelidad griega que pretendían recuperar Constantinopla. Estos últimos fueron básicamente el Imperio de Nicea, el Imperio de Trebisonda y el Despotado de Epiro. Cada uno estaba dirigido por distintas familias bizantinas que seguían pugnando por el trono imperial, entre ellas los Láscaris, los Comneno y los Ducas. Si bien el Imperio de Nicea consiguió recuperar Constantinopla bajo la dirección de Miguel VIII Paleólogo en 1261, los otros estados no reconocieron esta toma y siguieron existiendo con suerte diversa, algunos incluso alcanzando el siglo XV y cayendo bajo el avance otomano más tarde que la propia Constantinopla. Los estados griegos en el caótico escenario de los siglos XIV y XV lucharon entre sí, se aliaron también entre sí y pactaron asimismo en función de las circunstancias con territorios latinos pese a ser teóricos enemigos. Nos embarcamos en el segundo programa monotemático sobre el caos griego en Almas del Medievo.
Música
Track: The Revelation
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Track: Echoes of Ireland
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